jueves, 2 de agosto de 2012

EL GAUCHO


Mi  debilidad por las carnes simplemente se derrite por lo bien que la hacen en este acogedor restaurante argentino.  Una entrada mas que acogedora en la que tienes primera fila para ver lo bien que hacen las brasas y los chorizos al fuego.  Una barra para poder tomarte un chatito de vino tinto con un chorizito antes de entrar al salón para comer.

El salón es gratamente acogedor, con amplio espacio entre mesa y mesa.  Luz tenua hace que se pase el tiempo volando ya que con una buena botella de vino entraras en calor inmediatamente.

Mis recomendaciones, una provoleta a la brasa de entrada con chimichurri, una ensalada de la casa y de plato principal un lomo a labrasa.  Bien servido en un recipiente con brasas para que puedas hacerlo al tu gusto.

Sin embargo, una mención especial se merece el postre que ya es para morir.  Unos crepes de dulce de leche con helado te mandara en coma a tu casa del gusto que te dara.

Calidad-Precio….un 10.  Volveras, y lo recomendaras y siempre sin duda quedaras como un rey/reina con tus amigos.

LA FAYETTE


Pequeño y acogedor, un poco snob en muchos aspectos, pero rápidamente te acomodas en el ambiente.  Pocas mesas hacen fácil que la atención del propietario y el camarero sea absoluta.  Aunque lo preocupante seria que no lo fuera con tan pocas mesas.

Recomendado hacer reserva, ya que no requiere mucho que se llene.  La comida es mas que aceptable, excepto el  carpacho de gamba roja que tiene un sabor tan sobreponente de la vinagreta que no sacas absolutamente nada de sabor a la gamba roja.  El pato, espectacular, recordando que es un sabor un poco fuerte, le anaden una densa salsa que permite amenizar el gusto.  

Desgraciadamente los vinos españoles son inexistentes, y aunque el propietario se escuda en que es un restaurante francés, mi patriotismo confirma mi experiencia que los vinos españoles no tienen que envidiar a los franceses.   

El precio, para mi gusto, mas de lo que merece, aunque para darse un gusto en un ambiente acogedor, comodo y como si estuvieras en casa, merece la pena probar.

BANGKOK


Restaurante Thailandes en la calle Arenal en Madrid.  Pequeño y coqueto, la decoración es sencilla y acogedora, perfecto para anadir ambiente de origen.   La carta puede ser un poco confusa ya que la mayoría no entendemos de sus variedades y puedes encontrar el mismo plato solo diferenciado por el color del curry.

Solucion, mejor dicho recomendación, pregunta ya que el color del curry determina lo picante que puede llegar a ser la comida.  Saldado ese escalon, si no tienes información previa de las comidas de Thailandia, dejate recomendar.  De ninguna forma te saldrá por uno ojo y absolutamente todo esta fantásticamente cocinado.   Eso si, los pescados están excepcionalmente buenos.

Hay que tener cuidado para los que tengan alergias a los frutos secos, ya que muchas de las salsas que se utilizan en la comida tailandesa contiene cacahuetes.

ROBATA


Para empezar, aclarar que este es un restaurante Japones, no un chino/asiático que sirve sushi pre-empaquetado.   Ubicado paralelo a la Gran Via de Madrid en el barrio de Chueca.   El chef es uno de los 5 cocineros japoneses reconocidos por excelencia por la familia imperial Japonesa.  Pero eso mismo lo ves mas que reflejado en los precios que te ponen.

Variedad de comida?  Insuperable!! Aquí podras saborear sushi, sashimi, maki, tempura, etc.  Lo que no probaras es Tepanyaki, porque no tienen plancha para ello. 

Aun asi, la comida es para los que entienden de comida japonesa, de lo contrario uno se puede sentir como en un país extranjero haciendo muchas preguntas.  Recomiendo prestar  especial atención a la factura cuando llege a la mesa, que aunque ligera de papel, pesada en el bolsillo, y en mas de una ocasión, me han tenido errores en ella.

Recomendable, si, pero solo si es para darte un gusto en ocasión.